La toma del pulso, en personas mayores
Al igual que en la temperatura, el pulso de una persona cambia durante el curso del día. El pulso es afectado por factores externos tales como actividad física, emociones y medicamentos.
El pulso se define como el número de veces que se contrae el corazón de una persona por minuto. Un pulso normal late con un ritmo regular. Debe tener pausas regulares entre latidos.
Donde tomar el pulso:
• Carótida (cuello).
• Braquial (debajo del brazo).
• Radial (muñeca).
• Apical (pecho).
A continuación, se describen unas pautas para llevar a cabo la toma del pulso radial (muñeca);
Cuando esté tomando el pulso, tenga cuidado de presionar suavemente la muñeca. Si pone demasiada presión, su medida será imprecisa. También acuérdese de NO usar su dedo pulgar cuando esté tomando el pulso. Su dedo pulgar tiene un pulso que podría confundirse con el de la persona.
Para una persona mayor en reposo, la escala normal del pulso radial es de 60 a latidos por minuto.
Etapas de la toma del pulso radial (muñeca):
• Lávese las manos.
• Asegure la intimidad de la persona.
• Explíquele lo que usted va a hacer.
• Pídale que se siente o se recueste. Asegúrese que se sienta cómodo y tranquilo, con su brazo apoyado sobre una mesa.
• Ponga sus tres dedos del medio en la parte de adentro de la muñeca de la persona. Ponga presión suave hasta que sienta el pulso.
• Cuente el número de latidos durante 60 segundos, usando el segundero de su reloj.
• Registre sus resultados, incluyendo si el pulso era regular o irregular y si era fuerte o débil.
• Comunique los resultados por arriba de 100 latidos o menos de 60 latidos o alteración del ritmo o debilidad del pulso, al médico.
• Lávese las manos.
Fuente: Fuente: Manual del cuidado de personas mayores dependientes y con pérdida de autonomía.