La importancia de la identidad e imagen corporal en las personas mayores
El aspecto físico expresa nuestra personalidad y cómo deseamos mostrarnos a los otros. La imagen externa da mucha información a los demás de cómo somos y cómo estamos. Por eso, cuando ayudamos a otras personas en su arreglo personal, es fundamental cuidar su aspecto.
En el caso de personas con grave deterioro, cuidar la imagen personal es especialmente importante, ya que garantiza cierta continuidad con la identidad de las personas. Mantener un aspecto esmerado en las personas con gran deterioro, respetando sus gustos y su estilo, es la mejor forma de mostrarles respeto y de que se sienta que esta persona sigue siendo ella misma.
Cómo cuidar la imagen personal:
– Los complementos y los detalles personales en el arreglo personal. Por ejemplo, unas uñas bien pintadas, un peinado cuidado o algún adorno especial (horquillas bonitas, pañuelo bien colocado…) ofrecen siempre una imagen personal agradable.
– La limpieza y el buen estado de la ropa y objetos que acompañan a la persona. La ropa cuidada, sin manchas, la ausencia de migas o sustancias en la silla de ruedas, la limpieza de sus complementos (zapatos, bolso…) ofrecen una imagen positiva de la persona y también de quienes la cuidan
– Cómo usamos los «baberos». Su uso indiscriminado ofrece una imagen negativa de las personas. Podemos utilizar otras alternativas que hagan sentir mejor a la persona (delantales, servilletas grandes con diseño bonito, adulto). Debemos procurar que sólo se usen cuando sean estrictamente necesarios.
– La uniformidad «institucional». Todos en chándal o con batas iguales… El uso de mantitas idénticas para abrigarse. Vasos en las meses para beber todos. Los cortes de pelo y peinados similares. Las personas muy dependientes, todas juntas, en fila en una misma sala…Hay que buscar otras posibilidades.
– Las actividades que se realizan. Realizar dibujos con modelos pensados para escolares ofrece una imagen infantil. Un disfraz será divertido si la persona se anima a ello, pero humillante si se siente obligada o no comprende el sentido de la actividad. Hay que ofrecer una imagen positiva de una persona mayor activa-adulta, no infantilizada…
Fuente: Modelo de atención centrada en la persona. Cuadernos prácticos. 11. Vida cotidiana. Los cuidados personales. Autores: Teresa Martínez, Pura Díaz Veiga, Mayte Sancho y Pilar Rodríguez.